Hoy estamos ante uno de esos juegos en los que voy a cambiar un poco el formato para el blog. No es un juego que tengamos ni yo, ni mis amistades, sino que lo he jugado en un local con una copia inglesa de la editorial Z-man. Os digo esto porque todo lo que os pueda contar es fruto de un momento a amor puntual xD.
Estamos ante un juego pequeño que podremos llevarnos a cualquier lado y que permite jugar a un gran número de personas. Si le añadimos que tiene poquitas reglas y que se prepara y recoge muy rápido... podríamos decir que estamos ante un juegazo para esas condiciones. Sin embargo si lo queremos para jugarlo en nuestra propia casa el tema empieza a cojear porque a 4 jugadores necesita un lavado de reglas bajo mi punto de vista. Se descubre muy fácilmente quién es el malo y a partir de ese punto el resto de la partida es más o menos predecible.
Mi propuesta es que en lugar de incluir las cartas de saboteador según el número de participantes, simplemente las barajéis, déis una a cada uno y habrá partidas con exceso de saboteadores, partidas con un número normal y partidas en las que todos os parecerán sospechosos pero nadie será "malo".
Aquí os dejo el vídeo donde os explico cómo funciona y mi opinión sobre dicha experiencia (^.^):
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