Star Wars Rebellion (Reseña)

El mundo de Star Wars entró en mi cabeza gracias a un primo mío al que le encantaba la banda sonora de la por aquel entonces única trilogía de la saga. Tenía además las películas y me las dejó ¡Flipé! Obviamente años después cuando salió la siguiente trilogía que no iba a ser siguiente, sino anterior (Los que conozcáis del tema me entenderéis) tuve que ir a verla y por contra de lo que la gente decía ¡Me gustó! De nuevo pasaron los años y terminó llegando un nuevo paquete de películas y con él... la aparición de un montón de juegos que explotaban esa ambientación. Aunque todos me llamaron en su momento debido al boum mediático de youtubers y demás bloguers, ninguno llegó a decirme nada más allá de "estás manejando miniaturas de las películas y por eso te gustan". No sé vosotros, pero yo cuando busco un juego basado en una película... ¡Quiero tener la sensación de estar dentro! Si vas a darme otra sensación, ponlo en un mundo inventado y ya me cuidaré yo de comprarlo y disfrutarlo por lo que es y no por dónde está. En ese sentido en su día ya me pareció soberbio el de Juego de Tronos. También era de esta casa, pero ¿Volverán a repetir el acierto?

La respuesta es... ¡¡¡Si!!! Paradójicamente, aunque me siga pareciendo un Risk (Yo diría que da igual lo que le hagan a los juegos, que mientras haya que tirar dados y sean de conquista... probablemente todos me parezca un Risk xDDD) el juego tiene muchas cosillas que hacen que en todo momento tengas esa sonrisa maligna en la comisura del labio porque sabes que si el contrario hace lo que esperas... se va a comer una buena. Desde sacrificar conscientemente a Obi-Wan Kenobi, pasando por destruir la Estrella de la Muerte con un solo Ala-X en un alarde de extrema suerte o incluso meter en criptonita a Han Solo... el juego está plagado de momentos bastante tensos en los que el Imperio buscará e intentará aplastar la base rebelde para llegar a la victoria, mientras que los malvados Rebeldes tratarán de evitar la aniquilación viendo con desesperación que el maldito reloj de arena está atascado y que por muchas tropas que creen... el Emperador siempre tendrá más y más fuertes. Echas las presentaciones... 

-Contenido:

¿Sabéis lo que implica el termino cajote? Todo nos llega en una caja (29,5 x 29,6 x 13,5 cm) con un arte que es una pasada, pero que como muchos ya se han quejado tiene mucho aire. En las patatas fritas el aire es para que no se estrujen, pero aquí... ¿Cómo se justifica?:

• 1 Tablero (56 x 112 cm)
• 89 Miniaturas imperiales y 64 rebeldes
• 68 Cartas de misión
• 34 Cartas de acción
• 31 Cartas de sonda
• 30 Cartas de  táctica
• 15 Cartas de objetivo
• 86 Tokens
• 25 Líderes
• 2 Paneles de jugador
• 10 Dados especiales
• 1 Libro de reglas (Dividido en 2)

-Unboxing:

"NOS ENCONTRAMOS EN UN PERIODO DE GUERRA CIVIL... Los últimos reductos de la Antigua República han sido ya barridos; la galaxia entera está sometida al reinado de terror del Imperio. Su recién construida estación de combate, la Estrella de la Muerte, es lo bastante poderosa como para destruir a cualquiera que se oponga a su dictadura. Pero ha surgido una nueva esperanza. Un grupo de valientes ha decidido luchar contra la tiranía imperial. Desde su base oculta, estos rebeldes planean derrocar al Imperio y restaurar la libertad en la galaxia."

-Tutorial:

Un tochaco de juego se abre ante nosotros y tenéis que tener clara una cosa: La complejidad no reside en sus reglas, sino en la cantidad de puntitos que tiene. Una vez tengáis preparado el tablero (Si queréis saber cómo, ved el vídeo), el juego se divide en 3 fases:

1. Fase de asignación: Los jugadores reparten tareas a sus líderes tal y como ellos quieran. Esas tareas serán tratar de hacer misiones o bien mover tropas por el mapa. Siempre será conveniente tener algún líder en la reserva al que no se le asigne nada porque eso nos permitirá hacer una oposición ante las misiones del enemigo o incluso defendernos de un ataque.
2. Fase de mando: En este punto se van resolviendo esas misiones y movimientos por el mapa líder a líder; y es aquí cuando podrás presentar oposición a alguna misión emprendida por el contrario o mandar como apoyo en la batalla al personaje que dejaste en la reserva.
3. Fase de recuperación:

• I: Todos los líderes que pusimos en el tablero regresan a la reserva.
• II: Los jugadores roban 2 nuevas cartas de misión teniendo en cuenta que el límite es de 10 y si este se sobrepasa tendrá que descartarse de algo.
• III: El imperio roba dos cartas de sonda.
• IV: Los rebeldes roban 1 carta de objetivo que les ayudará a acelerar el tiempo de la partida y por tanto acercarán su victoria.
• V: Avanza el indicador de tiempo y se hace lo que marque. Hay casillas en las que no se hace nada, casillas en las que se reclutan nuevos líderes, casillas en las que se construyen nuevas tropas (en función de los sistemas que controlemos del tablero) y casillas en las que se hacen ambas cosas ¡Subidón! ¡Subidón!
• VI: Lo que estaba siendo producido en el track de construcción avanza una casilla de forma que lo que estaba en la casilla 3 pasa a la 2, lo de la 2 a la 1 y lo de la 1 a nuestra mano. Esto último es lo más importante porque esas nuevas piezas podremos colocarlas en el tablero en sistemas productores leales o subyugados siempre y cuando no nos pasemos del límite de 2 por sistema.

¿Que se busca con todo esto? Pues como ya os comenté con anterioridad, cada bando tiene sus propias condiciones de victoria:

• Imperio: Gana si logra encontrar y destruir la base rebelde antes de que el token de tiempo y el de los rebeldes se encuentren (Es bastante complicado para este bando el lograr la victoria como no tengas algo de suerte y encima los rebeldes sean buenos en el arte del troleo).
• Rebeldes:  Ganan si logran que los tokens antes mencionados se encuentren antes de que el imperio localice y destruya su base.

Y esto es todo amigos. Ahí os dejo igualmente el vídeo-tutorial porque siempre os puede ser de utilidad:

¿Sabíais que se puede jugar en solitario a este juego? Seguro que a más de uno de vosotros ni se os había ocurrido eh :P Aquí abajo tenéis la forma de jugarlo en solitario usando a lor Rebeldes y si queréis usar al Imperio tendréis que ir a este link.

.*Partida versión SOLITARIO manejando a los rebeldes (Click aquí o en la imagen):

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*Partida versión SOLITARIO manejando al imperio (Click aquí o en la imagen):

*Partida al Auge del Imperio (Click aquí o en la imagen):

Esta partida es con el añadido de la expansión mencionada arriba, pero el funcionamiento básicamente es el mismo que en el juego básico. 

-Opinión:

Estamos ante un juego con un nivel de producción brutal. Tanto el arte, como los componente son diría que perfectos. Lo que no resulta tan perfecto es ese inserto que hace que sacar y guardar este juego sea algo similar a una pesadilla. Si metes todo en bolsitas... son demasiadas cosas que meter/sacar de ellas. Así que solo queda una opción viable e inteligente para eliminar la pereza al pensar en este juego y es hacerte tu propio inserto en el que por un lado tengas las cosas del bando rebelde y por otro las de los imperiales. Así sería cuestión de sacar ambos insertos y cada uno para un jugador.

Dicho esto, estamos hablando de 2 jugadores, pero es que según la caja es de 2 a 4. No diré que sea mentira, pero es que... ¡Es MENTIRA! El juego a 2 funciona perfecto porque cada jugador llevará su bando y listo. El problema del juego a 4 es que cada jugador llevará incoherentemente la mitad de uno de los bandos y... ¿Qué termina sucediendo? Que dejas esa estupidez de idea de lado y te pones a jugarlo modo party con tu compañero ¿Problema? Que si uno de los dos conoce más del juego o se le dan mejor las estrategias... uno mira y el otro hace. Que... diver...

Ya centrándonos en lo que es el juego lo cierto es que a dos jugadores da una experiencia muy buena. Hay partidas en las que suceden cosas que también pasaron en las películas y partidas en las que nada de lo que pasa se vio en la pantalla. Si bien el juego me chifla, ahora mismo le encuentro una pequeña pega y es que creo que con dos jugadores que tengan un nivel similar... el Imperio podrá ganar en el 90% de las veces. El resto hasta llegar a cien se deberá a mala suerte en sus cartas y suerte en las del Rebelde. Quizás me equivoque, pero si hago un gráfico... de momento he ganado el 100% de las partidas que he jugado usando al Imperio. De modo que... sabiendo que no soy un gran estratega y que se me suelen dar como el culo las tiradas de dados militares, creo que tengo mis razones para pensar que está MUY inclinado hacia el bando del poder oscuro. Esto no necesariamente tiene por qué ser malo. De hecho puede darle mucha chicha a jugar usando a los rebeldes, pero del mismo modo puede quitársela a ser del lado oscuro ¿No creéis? Digamos que hasta cierta cantidad de partidas... en el bando del Emperador te entretienes porque sacas tus montones de tropas por el tablero, te dedicas a construir estrellas de la muerte, pasearlas y reventar planetas, construyes super-destructores... pero... ¿Y cuando se pase la novedad? Seguirá siendo igual de genial manejar a ese bando? Tengo mis dudas y son dudas que no podré despejar hasta dentro de un par de años. Qué menos para tener una opinión realmente formada ¿No?