El Juego del Rico Rico (Reseña)

Volvemos a quitarle el polvo a otro de esos juegos de cuando era pequeñajo. Lo curioso del asunto es que con esas edades el juego no me parecía algo wow, pero si que me entretenía lo suyo. Habrá quién diga que eso es porque el juego ha envejecido mal, pero yo creo que tendríamos que darle un tirón a quien piense así porque... ¿Cuál era el público objetivo de este señor? Claramente los niños. Como adultos nos podrá parecer más o menos interesantes, pero no podemos olvidarnos de que nunca fue pensado en nosotros los mayores.

Pese a eso el arte me sigue pareciendo digno de ponerlo en un pedestal. Resulta muy desenfadado y es lo que me lleva a pensar que tal vez unido al tema cocinitas, ahí estuviese la razón de que lo disfrutase una vez en mesa. Aunque ya os adelanto que tampoco es que lo matásemos a partidas jajaja.

-Contenido:

Todo nos llega en una pequeña caja (12,6 x 9,5 x 2 cm) con un inserto que ya quisieran otros juegos.

• 8 Cartas de objetivo
• 2 Cartas de comodín
• 40 Cartas de ingrediente
• 1 Reglamento 

41,57,5

-Unboxing:

"Un menú refrescante para un verano chispeante"

-Tutorial:

Comenzamos mezclando las cartas de objetivo y haciendo que cada jugador robe 1. Luego mezclamos los comodines con las cartas de ingrediente, formamos un mazo de robo, cada jugador robará 5 y además levantamos una y la dejamos sobre la mesa en una zona visible. El objetivo del juego está en conseguir tener en mano las 5 cartas de ingrediente que nos pide nuestro plato objetivo.

El jugador con el turno tendrá que coger una de sus cartas y soltarla en la mesa boca arriba. Una vez hecho esto podrá robar la carta visible en mesa o sencillamente robar la primera carta del mazo. El turno pasa al siguiente jugador y esto se repite hasta el momento en el que uno de los jugadores cumple su objetivo. En ese instante tendrá que decir "¡Rico, rico!"

-Opinión:

Pese a su buena caja e inserto, estoy más que seguro de que por ahí hay más de uno que está pensando en que ahí no cabrían las cartas enfundadas (Y tendrán algo de razón), pero es que en esta época lo importante de los juegos no era protegerlos, sino disfrutarlos, enguarrinarlos, ...

Como juego para un crío puede que sea adecuado. Sin embargo a muchos adultos yo creo que no les va a parecer sino una suerte de Oca con cartas. Tiene algo más de toma de decisiones que ese otro, pero vamos que tampoco es para tirar cohetes. Y... si, hoy día creo que hay mejores juegos para críos (Y que encima admiten ser jugados por adultos sin que estos se aburran <-Lo que personalmente me parece muy importante cara a juegos en familia).